Un antes y un después en la economía mundial
La historia de la humanidad cambió drásticamente cuando surgieron las primeras monedas acuñadas. Este avance no solo facilitó el comercio, sino que marcó el inicio de una economía más organizada y de los sistemas financieros que conocemos hoy en día.
¿Dónde y cuándo aparecieron las primeras monedas?
Las primeras monedas acuñadas aparecieron alrededor del año 600 a.C. en la región de Lidia, al oeste de la actual Turquía. Durante el reinado del rey Alyattes, y más tarde de su hijo Creso, el uso de monedas se convirtió en una práctica común para facilitar los intercambios comerciales.
🪙 Dato curioso: Creso es conocido por ser uno de los hombres más ricos de la antigüedad, al punto de que aún existe la frase “tan rico como Creso”.
¿Cómo eran esas monedas?
Estas monedas eran bastante diferentes a las actuales:
- Material: Hechas de electro, una aleación natural de oro y plata.
- Forma: Irregular, parecidas a un frijol o a una almendra.
- Acuñación: Se hacían a golpe de martillo, marcando un sello sobre el metal caliente.
- Diseños: Muy simples, solían llevar símbolos como un león (emblema real), figuras geométricas o inscripciones cortas.
¿Por qué fueron tan importantes?
Las monedas revolucionaron la manera en que se realizaban los intercambios comerciales:
- Establecieron un valor estándar.
- Evitaron el trueque.
- Permitieron que el gobierno controlara el sistema económico.
- Fomentaron el comercio a larga distancia.
Con el tiempo, este sistema se expandió por todo el mundo antiguo: Grecia, Persia, Roma, China… y más allá.